Texto de contraportada
Este libro se compone de 283 poemas estructurados en: un delantal, trece capítulos y un dorsal. En el dorsal, que es algo así como una dedicatoria, se incluyen sendos homenajes a Jorge Manrique, Garcilaso y Bergamín, que considero que mucho tienen que ver con lo que se dice y el cómo se dice en este libro, con mi agradecimiento y salvando las distancias de rigor.
El misterio, su música, la niebla… el hogar predilecto de los vientos. El insólito reto del futuro que se decanta en álgidos momentos. Revoltijo de luces y de sombras a ras de piel, a punto de tormenta… todo lo mudará la edad ligera para no hacer mudanza en su costumbre.
La pureza del signo y sus raíces turbias por avalanchas sucesivas como tarea común y cotidiana.
Poco más que decir, como epigrama es largo –habréis visto que incluyo a Garcilaso –, con lo cual no me es fácil resumirlo. Por tanto, aquí se quedan estas notas, en función de forzado protocolo.
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